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PRIMERA ACTIVIDAD DE MAR DE NUBES

PRIMERA ACTIVIDAD DE MAR DE NUBES

ASPRODES - FEAPS Salamanca, enviado el 20/05/13

La actividad consistió en realizar un tramo de la ruta de la plata de Puerto de Béjar al puente de la Malena, visita de miliario en el corral de Manolillo Chinato y ruta de los miliarios hasta Montemayor del Río.

 La Sierra de Béjar como marco incomparable; un valle construido a pico por el Rio Cuerpo de Hombre de este a oeste; una fractura en la montaña aprovechada para construir una vía de comunicación entre el norte y el sur peninsular que tiene más de 20 siglos, la Vía de la Plata que enlazaba Emérita Augusta (Mérida) y Astúrica Augusta (Astorga); bosques donde predomina el roble y el castaño que nos hablan de un clima de montaña húmedo; carboneros, herrerillos, mirlos, arrendajos, milanos, cigüeñas, jabalíes; “praos” donde pacen ganados y sobre los que se asienta una economía, una cultura y sociedad rural ganadera en crisis desde hace décadas; un puente romano usado por la Mesta para la trashumancia desde Extremadura a León y también por peregrinos que se dirigen a Santiago de Compostela; un Castillo que cumplía una función defensiva de la Via de la Plata a cambio del cobro del “pontazgo”; un Pueblo al principio de la ruta, Puerto de Béjar, y otro al final, Montemayor de  Rio; un territorio que ha sido declarado por la UNESCO como “Reserva de la biosfera Sierra de Béjar-Francia”, y; un hombre, guardián de todos estos valores que como arma solo utiliza la poesía y palabra para remover conciencias “social adormecidas”. Esas son las coordenadas en las que situamos esta primera experiencia de Mar de Nubes. 

 
Un grupo de 70 personas nos adentrarnos en este mundo de naturaleza y cultura, donde hombre y medio natural son responsables del paisaje a partes iguales. Comenzamos la ruta, en el tramo de la Via de la Plata, a su paso por Puerto de Béjar, junto al “cercao”, en un bosque de robles y castaños. Los pájaros del bosque, en esta mañana fresca, nos dan la bienvenida. En el cielo, nubes altas y otras blancas algodonadas nos hablan de un día incierto en cuanto a posibilidad de lluvias en esta primera parte del día, aunque las nieblas del Puerto de Vallejera anuncian una tarde despejada. Este primer tramo de 3 km, hasta el puente de la Malena, es cuesta abajo y a su paso atraviesa algunas fincas de uso ganadero, las Arbejas, las Viñas, “ganados de viento en la región del olvido” que diría Julio Llamazares. Corrales para guardar el heno y también algún corral ganadero restaurado y aprovechado ahora como casa particular. 
 
Finalizamos esta primera parte de la ruta, en el Puente de la Malena, y que mejor para el descanso y el sosiego que el recibimiento de Manolillo Chinato, en su “prao” junto al corral de planta circular-ovalada, en cuyo interior hay uno de los miliarios mejor conservados de la Ruta de la Plata. Se trata del miliario CXXXIII (133) desde Mérida, que nos indica que hay 133 millas romanas desde Mérida hasta aquí.  Manolo es un poeta de estas Sierras que ha cantado el amor, la rebeldía y la libertad como pocos, de tal forma, que es uno de los poetas más queridos por la juventud (de cualquier edad) de este país.  
 
Nos explica Manolo de donde le viene el “duende” de la poesía, que le viene de sus amores, pero sobre todo de sus desamores, y es, en la soledad de estos parajes donde encuentra la inspiración y el valor para escribir poesías que anota en cajetillas de tabaco o en cachos de papel que se encuentra. Manolo es un hombre enamorado de estos paisajes, nos recita algunas poesías y lo hace intercalándolas con anécdotas que son pedazos de su  vida: “yo soy un hombre de campo”, “a la sombra de mi sombra” y “ama, ama, ama y ensancha el alma”. 
 
Nos despedimos de Manolo con la sensación de haber vivido un momento único e irrepetible. 
 
“Me voy a ir andando
por caminos de soledades
para ir sembrando en sus orillas 
mis libertades”
                                  Manolillo Chinato
 
Iniciamos la Ruta de los Miliarios desde el Puente de la Malena, un camino que nos llevará después de 6 km a Montemayor del Río. La ruta transcurre entre callejas, por las que discurre gran cantidad de agua, y por pistas. Durante toda la ruta, a mano derecha, el Rio Cuerpo de Hombre que nace en la Sierra Béjar, en un paraje conocido como Hoya Moros, y a mano izquierda un frondoso bosque de castaños, nos acompañarán hasta la localidad de Montemayor del Río. Montemayor es un municipio de unos 400 habitantes, que posee una bonita arquitectura serrana (piedra, adobe, vigas de madera en las fachadas y teja árabe), una iglesia, un centro de interpretación del castaño y de la cestería y un castillo medieval recientemente restaurado, cuya visita guiada bien merece la pena.